Repitiendo como el año pasado llegaron desde Bilbao para pescar siluros al lanzado dos pescadores que ya sabían lo que era toparse y verse las caras con un 2M, en esta ocasión la fortuna quiso sonreír en el último momento cuando ya casi desistíamos, si bien los pequeños siluros nos mantuvieron en vilo durante toda la mañana, con un montón de picadas y 8 capturas, al punto de la mañana un siluro que parecía pequeño en un primer momento pero que cuando se centró y encontró aguas profundas empezó a tirar como una auténtica bestia partió la línea por forzarlo demasiado, jamás se puede forzar a un siluro ya entrado en tamaño, pues si se hace solo tiene un final y es que la cadena señuelo, línea, equipo va a romperse por algún lado y casi siempre suele ser por el más débil, o sea la línea.
El caso es que cuando ya casi dábamos la pesca por finalizada y con el sol en todo lo alto logramos hacernos con un buen siluro de 1,98m que casi más que pescado, fue cazado, pues se delató entre unos carrizos moviéndolos escandalosamente, un lance preciso y el resto podéis imaginarlo, enhorabuena por tu “casi” 2M.
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