LA PESCA

Pocos lugares cuentan con las posibilidades de pesca que ofrece el río Ebro para la pesca del siluro.

Dependiendo de la temporada se pueden pescar siluros en sus diferentes modalidades durante prácticamente todo el año, los ejemplares de más de 2 metros, son bastante habituales.

Sin duda las modalidades más extremas para la pesca del siluro son al lanzado y a mosca, siendo ambas pura descarga de adrenalina, pero también hay otras formas de pescarlos más estáticas e igualmente efectivas como la pesca con pellets (catfishing).

La fama de las grandes carpas del Ebro ha saltado fronteras y son ya conocidas en toda Europa, siendo cada vez más los carpistas que visitan el Ebro, la variedad más frecuente es la carpa común aunque también cuenta con carpas royal y full scalled, el masivo cebado con pellets para la pesca del siluro ha hecho que las carpas crezcan rápidamente alcanzando mucho peso en un corto espacio de tiempo.

La pesca de la lucioperca (sandre) es también un símbolo del Ebro, en especial el embalse de Mequinenza  goza de una población de “sandras” realmente excelente congregando a pescadores de toda Europa, especialmente franceses con su popular técnica  “mort manié” o pesca con drachkowitch.

La reglamentación vigente en el embalse de Mequinenza impone una medida de 45cm y un cupo de seis capturas por pescador y día.

Aunque en el Ebro la pesca está abierta todo el año y es posible la pesca de todas las especies durante todo el año, para el siluro al lanzado y mosca los mejores meses son de finales de Marzo hasta Junio y Septiembre y Octubre y para la pesca del siluro con pellets de Mayo a Noviembre.

Para la lucioperca (sandre) de Enero a finales de Abril y Octubre hasta Diciembre.

Para la pesca de la carpa (carpfishing) de Marzo a Noviembre, aunque prácticamente todo el año es posible su pesca, las carpas del Ebro toman bien los cebos incluso durante los meses más fríos del invierno.

Alberto Millán.– Guía de Pesca